La reencarnación existe y parte de lo que vivimos en vidas pasadas, se transmite y perdura en nuestra alma, en la memoria de los genes y nos marca en una nueva vida.
Todos tenemos fobias y miedos, quizá tenemos miedo al agua porque cuando éramos pequeños estuvimos a punto de ahogarnos y nos creó ese miedo, pero seguro que también puedes pensar en alguna fobia tuya que no sepas de donde viene realmente. La respuesta es clara, proviene de vidas pasadas. Una experiencia traumática pasada en otra vida nos dejó esa huella en nosotros y que aún hoy perdura.
No necesariamente hablamos de fobias, sino también de sentimientos, inseguridades y sensaciones que vivimos sin encontrar explicación a por qué nos ocurre así.
Aunque tu no puedas recordarlo, tu subconsciente sí y así nos lo muestra.
Algunos somos almas viejas, lo cual quiere decir que llevamos cumplidas varias reencarnaciones, o por el contrario, podemos ser almas jóvenes si hemos cumplido pocas.
Detectar la herencia de vidas pasadas
Darse cuenta uno mismo de cuando estamos viviendo una herencia de una vida pasada es sencillo, basta con pensar en todos nuestros miedos o inseguridades que tenemos, o situaciones que hemos vivido y tras las que sentimos algo extraño, si no responde a un recuerdo de nuestra vida actual, es probable que estemos antes la herencia de una vida pasada.
Algunas de las fobias heredadas más comunes son:
- Miedo al parto
- Claustrofobia
- Miedo a que nos falte el aire
- Miedo al agua
- Miedo a no ver el fondo del mar
- Angustia al entrar a un lugar concreto
Compañeros espirituales
Otra de las situaciones que podemos haber vivido es cuando sentimos que ya conocíamos a alguien a quien acabamos de conocer. Esta persona es nuestro compañero espiritual, es alguien con quien en otra vida pasada tuviste una relación muy estrecha y os habéis reencarnado juntos para el reencuentro, posiblemente sea un amigo para toda la vida y, de otras vidas.
Sentir que ya hemos estado en un lugar
Si hacemos a otro lugar, otro país, es posible que por un momento desconectemos y sintamos que ya estuvimos allí, en otra vida y otra época.
Es posible estudiar cuáles fueron nuestras vidas pasadas, saber quién fuiste es algo siempre interesante y curioso de conocer. Se conocen varios métodos para descubrir nuestras vidas pasadas, uno de ellos es a través de la meditación con la técnica ThetaHealing®, la cual puedes descubrir asistiendo a uno de nuestros cursos o solicitando una sesión de terapia.